EL AMOR EN EL CINE

La línea argumental básica de cualquier guión cinematográfico tiene que partir, inexorablemente, del planteamiento y resolución de un conflicto. ¿Y qué mejor fuente de conflictos que una historia de amor? Os dejo una recopilación de escenas de seducción, amor y sexo en el cine (muy pronto “El amor en la literatura”):

-          ¿Dónde aprendiste a besar así?

-          Solía vender besos para obras de caridad.

-          Recuérdame que envíe mañana un cheque de cien mil dólares a esas obras de caridad.

(Tony Curtis y Marilyn Monroe)

CON FALDAS Y A LO LOCO.

-          ¿Le apetece tomar algo, señor Bond?

-          Yo me comía ahora un coñ…

-          ¡Oh, James, tómame! Slurrppppp…

JAMES BOND CONTRA EL DOCTOR LIENDRE.

-          James Bond, tu madre que subas. – Yo ahora no voy ni a cobrar una herencia.

-          Quiero que te desmayes. Para eso has nacido. ¿A que no te besó así ninguno de los tontos que has conocido? Aquí está este soldado del sur que te ama, Scarlett. Que quiere sentir tus brazos alrededor suyo, que quiere llevarse el recuerdo de tus besos a la batalla con él. No te preocupes por amarme. Eres una mujer que envía a un soldado a la muerte con un hermoso recuerdo. Scarlett, bésame. Bésame una vez.

(Clark Gable)

LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ (Los pelos como escarpias, Orejas).

-          Aquí tengo el A1 para imprimir el plano, nena.

-          ¿Ah, sí? Voy a quitarme la ropa, qué calor hace… Quiero que me enseñes el cajetín.

-          Mejor te enseño mi escuadra y mi cartabón.

-          Mmmmm, a ver qué grande tienes el transportador de ángulos.

DELINEANTES CACHONDAS XVI.          

-          Yo no soy nada… y si fuese algo, dejaría de serlo por ti.

LA FLAQUEZA DEL BOLCHEVIQUE.

-          Cuando uno es genial y lo sabe, como es mi caso, no hay que andarse con rodeos, nena. ¿A que estás loca por mí?

-          Siempre he dicho que amarse a sí mismo es el comienzo de un amor que dura toda la vida. Estoy segura de que serás muy feliz contigo mismo.

EL PROFESOR CHIFLADO (Para que digáis que no soy un cinéfilo, toma referencia a la Nouvelle vague).

-          Juego conmigo a ser feliz creyendo estar contigo. Después de todo este tiempo me deberías resultar extraña, pero, en realidad, me duele sentirse lejos.

DESEANDO AMAR (A mí me dicen eso y seguro que contesto: “Creo que es la gallina, pero como no me des más pistas…”).

-          A ver, pero qué rica estás, hija mía.

-          Mi no entender.

-          No hace falta que entender nada… Na-da. Pero qué bien hecha estás, ¡qué bien hecha! Te voy a convencer para que nos dejéis entrar en la Co-mu-ni-dad E-co-nó-mi-ca E-u-ro-pe-a, te voy a convencer al estilo español.

-          ¡Olé, español, toreador, paela!

-          Paella, chata, pa-e-lla.

SUECAS, BIKINIS Y BENIDORM.

Dudaba entre poner esta foto y una de “El diario de Noa”.

-          Mírate, eres de los que suplicaría por un poco de sexo…

-          Uno siempre reconoce a sus iguales.

MALLRATS.

Una vez coincidí con Kevin Smith en NY. Algún día lo contaré en el blog. Mientras tanto, os adelanto una exclusiva: Es bajito y cartoniano (que paren las rotativas).

-          ¿Me olvidarás?

-          Todos los días de mi vida.

MENSAJE EN UNA BOTELLA (una gran frase en una mierda de película, by the way).

-          General, tenga cuidado con su hija. Ha intentado sentarse en mis rodillas cuando yo estaba de pie.

(Humphrey Bogart)

EL SUEÑO ETERNO

-          Joe, he encontrado fotos de hombres desnudos en tu despacho. - ¡¡Sospechosos, eran todos sospechosos!!